Los abuelos ante los exámenes finales

abuelo enseñando a nieto
2 Dic, 2019

Los abuelos ante los exámenes finales

Se acerca el final del trimestre y llegan los temidos exámenes finales de los nietos. Los abuelos que suelen ayudar a sus nietos con las tareas escolares, de alguna manera también se estresan en estas fechas antes la llegada de los exámenes finales de los niños.

Los deberes escolares para realizar en casa suelen ser una costumbre más o menos cuando los niños llegan a tercero de primaria, alrededor de los 8 años. Con esa edad es importante que se comience a generar un hábito de estudio en el pequeño que deberá de perdurar durante toda su etapa educativa.

Mucho se ha polemizado sobre la bondad o no de los deberes escolares en casa y ya tratamos este tema en nuestro artículo ¿Deberes sí o no? Si bien es cierto que está demostrado que son necesarios para fomentar el aprendizaje individualizado, más a allá del mero entendimiento de la materia que se haya tratado en clase.

Papel de los abuelos con los deberes

Si eres uno de esos abuelos o abuelas que se encarga de sus nietos por las tardes, ya sabrás que en ocasiones no es fácil lidiar con los pequeños para que se pongan a realizar sus tareas.

Te damos unas claves para que te sea más sencillo:

  • En las tardes de los niños debería de haber tiempo para el juego y para sus deberes. Por ello, lo mejor será planificar la tarde en función de las tareas a realizar. Las tardes de invierno se hacen muy cortas cuando hay que jugar, merendar y hacer los deberes, por ello, la organización debe ser bastante estricta para que el pequeño sienta que le da tiempo a todo.
  • Un lugar adecuado. Para conseguir que el niño se pueda concentrar y rendir al máximo durante el rato que esté haciendo sus deberes, es esencial que el entorno sea el adecuado. Las casas de los abuelos no suelen tener un dormitorio infantil con un escritorio para el niño, por eso habrá que buscar un lugar de la casa donde se pueda sentir cómodo. Tiene que tener tranquilidad (en ningún caso puede estar la tele puesta), suficiente espacio para su libro, libreta y demás. No debemos olvidar que la luz debe ser adecuada.
  • Hay que intentar que haga sus deberes solo. Como norma habitual los deberes suelen ser actividades sobre lo que se ha tratado ese día en clase y los niños deben ser capaces de realizarlos de forma autónoma. Si desde el primer momento nos ponemos con ellos a explicarles y a decirles lo que deben poner, le estamos haciendo un flaco favor. El niño entenderá así, primero, que puede no atender en clase porque su abuelo o abuela luego se lo explica en casa y segundo, que no tiene que esforzarse en aprender ni cuestionarse los ejercicios porque su abuelo ya le dice la solución.
  • Ayudarle no es decirle lo que debe hacer. Cuando un niño pregunta es tentador darle un respuesta inmediata pero no siempre esta manera de actuar es la mejor. Si el niño viene con una duda debemos de dirigirle para que busque la información en sus propios libros. Es una manera de conseguir que sea autónomo y que aprenda a resolver sus propias dudas.

¿Qué deben hacer los abuelos ante los exámenes finales de los nietos?

Como acabamos de ver, los niños deben estudiar solos. Después suele ser muy habitual que el abuelo/a tome la lección al pequeño. Esta práctica suele ser muy recomendable pues es la manera que tendrás e saber si ha estudiado o no y si ha comprendido la materia. Por tanto, la actitud de los abuelos ante los exámenes sería sencilla: primero el niño estudia solo y después le preguntas la lección además de hacerle alguna aclaración o cuestión para saber que no lo ha memorizado al pie de la letra y que ha comprendido lo que está diciendo.

Algunos niños se ponen muy nerviosos ante la llegada de un exámen, aquí los abuelos también pueden colaborar a paliar esos nervios con su experiencia de vida. Pero seguro que lo que más seguridad y tranquilidad le dará al pequeño para afrontar la prueba será saber que ha estudiado y que su abuelo o abuela le ha ayudado después a comprobar que se lo sabe y que todo saldrá bien.

Mucho ánimo para los estudiantes en estas fechas, así como paciencia y buen hacer a los queridos abuelos y abuelas que hacen esa labor infinita con sus nietos.