
Prohibido llevar el móvil al colegio
Hace unos días que ha comenzado el curso escolar y en Francia han prohibido llevar el móvil al colegio por ley. La medida afecta a todos los escolares de primaria y también de secundaria. Y no sólo está prohibido llevar el teléfono durante las clases sino también durante los recreos. Esta medida ya ha sido tomada en otros países como en Dinamarca. En nuestro país es el propio centro el que tiene la potestad para normativizar el uso de estos dispositivos.
La cuestión está planteada: ¿Debería estar prohibido llevar el móvil al colegio por ley?
Argumentos a favor de la prohibición llevar el móvil al colegio
Está demostrado que la ausencia de móviles en las aulas incrementa la capacidad de concentración de los niños. Y, ¿para qué están en el colegio si no es para aprender y atender al profesor? Según un estudio de la London School of Economics realizado a más de 130.000 alumnos de 16 años, las escuelas que prohíben llevar sus móviles a clase a los alumnos han visto mejorados los resultados académicos en un 6,4% de media. También se ha demostrado que los peores estudiantes, que suelen ser los que más se distraen con los teléfonos, mejoran sus resultados más de un 14% si se eliminan de las aulas.
Si estuviera prohibido llevar el móvil al colegio, se podrían evitar o paliar en gran medida los casos de ciber acoso que sufren hoy en día muchos menores por parte de sus compañeros. El estudiante acosado no recibiría notificaciones en su móvil durante las horas lectivas y esto le haría poder concentrarse en sus clases. Por otro lado, los acosadores, al no tener una vía inmediata para insultar o increpar al acosado, se reducirían notablemente el envío de mensajes. Así evitaríamos que los acosadores utilicen el recreo para insultar, vía redes sociales, a algún compañero, aprovechando el anonimato que puede prestar internet.
Otro beneficio de no permitir el uso del los móviles en el colegio sería que se reducirían los conflictos entre profesorado y alumnado evitando interrupciones en clase. Actualmente, la gran batalla para los docentes en los centros donde se permite el uso de los móviles, es lidiar con los chicos sobre su utilización en las aulas. Muchas veces los profesores terminan confiscando el dispositivo hasta el final de la clase, lo que provoca situaciones de tensión entre profesor y alumno que serían totalmente evitables.
Si no hubiera móviles en los centros escolares, ni en clase, ni en los recreos se favorecería la sociabilización de los niños y jóvenes. Es bien sabido que hoy en día la mayor parte de sus relaciones las tienen a través de redes sociales. Si no tienen el móvil durante todas las horas lectivas tendrán que hablar, jugar e interactuar con el resto de compañeros cara a cara sin pantallas de por medio. Tendrían que dejar los emoticonos del Whatsapp y mostrar sus emociones de una forma real, sin poner un muñequito en una pantalla.
Argumentos en contra de la prohibición
No son pocas las personas que abogan por el derecho a la libertad de los escolares. Poco a poo hay que ir dejando que los niños aprendan a ser responsables en el uso de su dispositivo, por lo que prohibirlo puede que no sea sea la solución. Habrá que enseñarles a utilizarlo de forma responsable tanto en casa como en otros ambientes.
Algunos padres defienden la necesidad de tener el móvil en las aulas para poder controlar al niño. Por si el niño necesita llamar a sus progenitores en cualquier momento porque tenga algún problema bien en el colegio o bien en el camino a casa. Y digo yo, los padres nos criamos sin móviles y ¡estamos vivos!
En algunas escuelas utilizan los móviles con fines pedagógicos. Les enseñan a utilizar ciertas aplicaciones, buscar en internet o simplemente les dejan utilizarlos como calculadora.
El punto de vista de Quiero Un Abuelo es que los móviles han supuesto una revolución que ha cambiado nuestro estilo de vida. Debemos educar a los niños, enseñarles a ser responsables y a la vez permitirles que sean niños y que disfruten de su infancia.